Clean Energy Fuels y TotalEnergies anunciaron que el gas natural renovable de la granja Del Rio Dairy en Friona (Texas) comenzó a fluir en junio hacia el mercado del transporte y recientemente comenzó a generar créditos de números de identificación renovable (RIN) D3 según el Estándar de Combustibles Renovables de la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA), así como créditos a través del programa de Estándares de Combustibles Bajos en Carbono (LCFS) de Oregón.
El biometano producido en Del Rio Dairy e inyectado en el sistema de gasoductos del país representa un hito importante en la estrategia de Clean Energy para convertirse en líder tanto en la producción como en la venta de un combustible que es tan limpio que la Junta de Recursos del Aire de California le otorga una calificación promedio de intensidad de carbono de -331.
«La demanda de gas natural renovable no para de aumentar. No existe una manera más fácil o inmediata para que las flotas logren sus objetivos de reducir las emisiones de carbono que hacer la transición de sus camiones, autobuses u otros vehículos grandes al gas natural renovable. Convertir el desafío de gestionar el estiércol de grandes tambos como Del Rio Dairy en algo tan positivo como un combustible con bajas emisiones de carbono es una gran victoria para todas las partes», dijo Clay Corbus, vicepresidente senior de energías renovables de Clean Energy.
Clean Energy inició la construcción del digestor de biogás de Del Rio Dairy en noviembre de 2021, completó la construcción en febrero de 2023 y almacenó el biometano producido hasta la aprobación regulatoria en junio. Del Rio es el primer proyecto de gas natural renovable con baja intensidad de carbono completado por Clean Energy y fue financiado a través de una empresa conjunta entre Clean Energy y TotalEnergies. Esta lechería multigeneracional, de propiedad y gestión familiar, cuenta con 7.500 vacas.
La agricultura representa casi el 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de los EE.UU. y el sector del transporte representa otro 28%, según la EPA. La captura de metano de los desechos agrícolas reduce estas emisiones. El biometano, producido a partir del metano capturado y utilizado como combustible vehicular, reduce significativamente las emisiones de GEI durante el ciclo de vida en comparación con el diésel. Esto le permite ser uno de los únicos combustibles que recibe una puntuación negativa de intensidad de carbono basada en la reducción de emisiones en la fuente y en el vehículo.
Fuente: Clean Energy