La Secretaría de Ambiente de Bogotá anunció un proyecto de resolución denominado Etiquetado Vehicular Ambiental (EVA) para clasificar el tipo de vehículos de acuerdo con la forma en que contaminan o emiten material particulado. Su implementación será inicialmente con camiones de carga. En un principio, será un piloto de dos años que comenzará a funcionar desde el primer trimestre de 2023. La medida busca mejorar la calidad del aire y reducir los riesgos de la contaminación y afectación en la salud de las personas.
“En Bogotá y en Colombia, hasta ahora, las medidas de restricción o cualquier incentivo a la circulación de vehículos se ha tomado con base en el número de la placa. En 2023 iniciaremos con el piloto del EVA. La idea a futuro que tenemos es la de caracterizar y clasificar los vehículos, no por su número de placa, sino por cómo contaminan”, dijo la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.
Las nuevas formas de movilizarse, el cambio de tecnologías, el uso de vehículos que funcionan a gas natural, así como los eléctricos e híbridos, son alternativas que algunos transportistas han venido implementando en la ciudad. Por eso, el Distrito quiere reconocer a través del EVA a aquellos propietarios de vehículos que han apostado por estas opciones.
“Hasta ahora las medidas restrictivas se han hecho únicamente por la edad del vehículo, pero muchas personas que tienen un vehículo viejo le hacen cambios en tecnologías, mejoras, aditivos que hacen que contaminen menos. Por eso, el etiquetado ambiental lo que permite es que los clasifiquemos realmente con las condiciones reales del vehículo y las consecuencias de su circulación en las vías de Bogotá”, agregó Urrutia.
El proyecto, que se enmarca en el Plan Aire 2030, iniciará en el primer trimestre de 2023, con cerca de 60.000 transportadores de carga. El piloto, que no contempla los vehículos particulares por ahora, será gratuito, voluntario, no modificará la medida “Pico y Placa” y no acarreará sanciones. Los camiones se clasificarán por colores de acuerdo con el modelo, tecnología y cantidad de emisiones que generan.
“La idea es que quienes vigilan las vías tengan la capacidad de evaluar con toda facilidad ese color para saber cuánto contamina ese carro y si debe tener alguna restricción o no”, comentó la secretaria de Ambiente.
“A largo plazo lo que vamos a hacer es que los programas que restringen circulación, por ejemplo, de transportadores los fines de semana, se hagan con base en esta información, y para eso nos va a servir el etiquetado. Al final esperamos tener un programa de Pico y Placa que sea realmente con base en el etiquetado y que los vehículos que más restricciones tengan sean los que más afectan la salud de los bogotanos por medio de la contaminación”, concluyó Urrutia.
Fuente: Secretaría de Ambiente de Bogotá